Los perros y los gatos tienen uñas y dientes afilados y una curiosidad prácticamente inagotable.
Y esta combinación puede ser peligrosa.
Para mantener a su animal doméstico sano y salvo dentro de casa o en el jardín, siga estos consejos de los veterinarios:
Mantenga los medicamentos fuera de su alcance.
Recuerde que los perros y los gatos no pueden leer los prospectos. Y el hecho de que un envase de medicinas haya sido diseñado «a prueba de niños» no quiere decir que el animal no pueda acceder a su concenido.
Tenga en cuenta que el perro o el gato pueden destruir el envase con los dientes.
Si su animal de compañía es uno de esos intrépidos exploradores con una asombrosa habilidad para abrir las puertas con el hocico, considere la posibilidad de asegurar las puertas con cerrojos especiales a prueba de niños
Elimine los residuos tóxicos.
Muchos productos de uso doméstico, como los pesticidas, raticidas o los anticongelantes, resultan tóxicos para los animales domésticos.
La ingestión de una pequefia cantidad de anticongelante, por ejemplo, puede ser mortal para el animal.
Es recomendable mantener al animal alejado siempre que se trabaje con productos tóxicos. También es aconsejable limpiar cualquier salpicadura de inmediato, antes de que su amigo se acerque a investigar
Tenga cuidado con los cebos.
Los aficionados a la jardinería a menudo ponen cebos para los caracoles y luego permiten que el perro o el gato deambulen libremente por el jardín.
La sustancia contenida en estos cebos tiene un sabor tan agradable para los animales domésticos como las galletas, de modo que es casi inevitable que lo coman, y se trata de un producto altamente tóxico.
Mantenga el cubo de la basura cerrado.
Para la mayoría de los animales de compañía, el contenido del cubo de la basura es un auténtico banquete.
Cuanto más intenso sea el olor, más le gustará. Para salvaguardar la salud de su aparato digestivo y evitar la suciedad, asegúrese de poner una tapa al cubo de la basura y mantenerlo fuera del alcance del animal.
Evite las electrocuciones.
Muchos perros y gatos disfrutan mordisqueando los cables eléctricos, un hábito que puede tener consecuencias fatales.
Es conveniente mantener los aparatos eléctricos desenchufados cuando no están en uso.
Por otra parte, evite el peligro que suponen los cables situándolos detrás de los muebles debajo de las alfombras. Como medida de protección a corco plazo contra cachorrillos o gatitos, puede optar por cubrir los cables expuestos con una gruesa capa de cinta aislante, lo que los hará más difíciles de morder.
Otra solución es rociar los cables con un repelente especial para perros y gatos, de venta en tiendas especializadas.
Cuidado con el agua.
Aunque perros y gatos son buenos nadadores, si caen dentro de una piscina, es probable que no consigan salir.
No permita que los animales domésticos, en particular cachorrillos o gatitos, jueguen cerca del agua, a menos que usted se encuentre cerca para vigilarlos.